Congeladona: tiendas como dinamizadores del espacio público.

Ideas previas:

Se creó una imagen de marca que comunicara valores actuales, es decir, una estética identificable que hace que el cliente la reconozca al entrar. Transmitir sensaciones concretas, sensitivas y emocionales con la arquitectura, de la misma forma que lo hace la publicidad. La arquitectura es capaz de transmitir los valores abstractos que desea proyectar la empresa. Estas ideas son: 1.-Transparencia: para ello construye la tienda con elementos muy cristalinos y transparentes como vidrios, cristales y metacrilatos. 2.-Eficiencia y productividad: mediante la inteligencia que connota utilizar nuevas tecnologías, materiales y técnicas constructivas actuales: pantallas led, techos tensados retro-iluminados, etc. 3.-Concienciación medioambiental y naturaleza: Utilización de colores y materiales que recuerden a la naturaleza: madera y piedra natural.
El proyecto para la tienda trata de proporcionar una experiencia espacial sugerente y relajante al usuario, de forma, que se grave en su memoria asegurándose así que este volverá en el futuro, también trata de ser funcional y facilitar, e incluso inducir, la compra. Se proyectaron dos accesos, el de servicio y el principal que debía incorporar de la vitalidad de la calle a la tienda para hacer que el cliente entre a la tienda, por lo que se diseño muy transparente.

Concepto espacial:

Las formas del espacio se modificaron mediante la incorporación de elementos añadidos en suelo y techo. De esta forma el mobiliario incorporara todo el equipamiento necesario para el desarrollo de la actividad en un solo elemento: prismas de madera que contienen las neveras, los productos, la iluminación y la señalética. Estos elementos nos configuran el espacio y las circulaciones. El uso de materiales naturales; piedra y madera, produce una sensación agradable a pesar de la potente luz blanca necesaria para la exposición de los congelados. El resultado es un ambiente ingrávido y confortable.

Iluminación:

Se utilizaron luminarias de halogenuro metálico sobre el pescado y el marisco que resaltan la frescura del producto, y tiras leds cálidas en pasillos para evitar ver los rostros de las personas demasiado pálidos. Se dispuso una gran intensidad lumínica ya que esto estimula para la compra. El diseño de las luminarias y situación de las mismas tratan de iluminar sin que se vea la fuente de luz, es decir se usan luces indirectas para evitar deslumbramientos.